Increíblemente, la violencia sin razón en Canadá parece estar en aumento, y esta vez una chilena fue víctima de una brutal agresión. Iris Pino Ortega, de 66 años, sufrió una golpiza que la dejó inconsciente mientras viajaba en el tranvía de Edmonton con sus hermanas. Un desconocido ingresó al transporte y la atacó sin motivo aparente, dejándola con golpes en el rostro y el mentón.
La preocupación de la familia se agravó debido a la falta de asistencia por parte de las autoridades canadienses. Aseguran que no han recibido la protección necesaria ni información relevante sobre el caso. A pesar de la denuncia, no han podido acceder a las grabaciones de seguridad para identificar al agresor, lo que ha generado mayor incertidumbre.
La situación no es un caso aislado, pues según diversas fuentes, casos de violencia sin razón han ocurrido en el pasado en Canadá. En abril del año pasado, un hombre empujó a una mujer de 78 años a las vías del tren ligero. También, en marzo de este año, se registró un ataque similar al de Iris, protagonizado nuevamente por un individuo sin motivo aparente. Además, tan solo hace un mes, una persona fue asesinada en las estaciones del tranvía, lo que agrega preocupación a la inseguridad en el transporte público.
La agresión a Iris ha tenido graves repercusiones para ella y sus seres queridos. Tuvo que cambiar sus pasajes de regreso a Chile y asumir gastos extras, sumando más dificultades a una ya lamentable situación.
Las autoridades canadienses deben tomar medidas inmediatas para investigar este tipo de actos violentos y proporcionar el apoyo necesario a las víctimas y sus familias. La seguridad en el transporte público y la prevención de este tipo de ataques se convierten en una urgente prioridad para mantener la tranquilidad y protección de los ciudadanos y turistas que visitan el país norteamericano.
