El Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, ha lanzado una preocupante advertencia sobre el cambio climático y sus devastadoras consecuencias durante el mes de julio, en el cual se han registrado altas temperaturas sin precedentes en diversas partes del mundo. En un discurso desde Nueva York, Guterres señaló que la era del calentamiento global ha llegado a su fin, dando paso a lo que denominó la «ebullición global».
Los datos proporcionados por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) confirmaron que julio de 2023 ha sido el mes más caluroso registrado en la historia del planeta. Estas cifras alarmantes han llevado al Secretario General a exigir una acción inmediata y contundente para enfrentar la crisis climática.
«El cambio climático está aquí, es terrorífico, y esto es solo el comienzo», declaró Guterres. «El aire es irrespirable, el calor es insoportable y el nivel de ganancias de los combustibles fósiles junto con la inacción climática es inaceptable».
El Servicio de Cambio Climático Copérnico de la Unión Europea respaldó estas afirmaciones, informando que el 6 de julio marcó el día más caluroso jamás registrado, con una temperatura media de 17,08 °C. La situación es crítica y requiere una acción global coordinada y decidida.
«No hay más dudas, no hay más excusas y no hay más tiempo para esperar a que otros se movilicen primero», enfatizó el líder de la ONU.
A pesar de reconocer que ha habido avances en la lucha contra el cambio climático, Guterres advirtió que no son suficientes para evitar las peores consecuencias. El Secretario General destacó la responsabilidad de los países del G20, quienes son responsables del 80% de las emisiones de CO2 en el mundo, para asumir un liderazgo efectivo y tomar medidas concretas.
«Todavía es posible limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados Celsius y evitar lo peor del cambio climático, pero esto solo será posible con una acción climática dramática e inmediata», enfatizó Guterres.
En su discurso, el líder de la ONU hizo un llamado a los líderes mundiales a intensificar la acción y promover la justicia climática. La crisis climática afecta de manera desproporcionada a las poblaciones más vulnerables y desfavorecidas, por lo que se requiere una respuesta justa e inclusiva.
«Todos los actores deben unirse para una justa y equitativa transición de los combustibles fósiles a las energías renovables, al mismo tiempo que se detiene la expansión del petróleo y el gas», instó Guterres.
El pronunciamiento del Secretario General llega en un momento crítico en la lucha contra el cambio climático, cuando el mundo enfrenta desafíos cada vez más urgentes. La comunidad internacional debe asumir un compromiso unificado para enfrentar esta crisis y proteger el futuro del planeta y las generaciones venideras. La ventana de oportunidad para actuar está disminuyendo rápidamente, y solo una acción decidida y concertada puede revertir el rumbo hacia un futuro sostenible y seguro para todos.